Según los analistas, Israel está arrastrando a Gaza a una nueva guerra Imprimir
Viernes, 15 de Enero de 2010 22:29

Ola Attallah/ Traducido del inglés para Rebelión por Beatriz Morales Bastos    

Los analistas creen que con sus recientes agresiones Israel está tratando de provocar que las facciones de la resistencia palestina respondan con ataques de represalia, lo que podrían utilizar como pretexto para emprender una nueva ofensiva mortal contra la asolada por la guerra Franja de Gaza.

"El mensaje de los ataques recientes es claro y la resistencia debería leerlo cuidadosamente", declaró a IslamOnline.net Talal Okal, un analista político. En los últimos diez días Israel ha acumulado varios ataques mortales que han matado a más de 12 palestinos en este enclave costero.

En respuesta a estos ataques, el lunes pasado grupos palestinos lanzaron un cohete Qassam desde Gaza que cayó en una zona vacía al oeste de la zona de Negev al sur de Israel.

En una reunión posterior con altos cargos militares el ministro de Defensa israelí Ehud Barak advirtió a Hamás, el partido que gobierna Gaza, que "midiera sus pasos" y no obligara a Israel a entrar en acción. "Israel no dudará en emprender otra guerra si la situación lo requiere", amenazó Barak.

Pero los analistas creen que en realidad Israel espera provocar a Hamás y a otros grupos de la resistencia para que lancen cohetes. "Cuando esto ocurra, Israel tendría la excusa perfecta para emprender una nueva masacre", afirmó Okal.

También señaló que normalmente Israel no necesita una razón para atacar a los palestinos, pero esta vez la simpatía internacional hacia el pueblo de Gaza, que fue asolado por la guerra israelí de 2008-2009 y que lleva años bajo un asedio atroz, exige una justificación. "Esta vez Israel necesita un buen pretexto que ofrecer al mundo y quiere que los palestinos se lo den".

Más de 1.400 palestinos, la mayoría de ellos civiles, murieron y 5.450 resultaron heridos cuando Israel desató una guerra de tres semanas contra Gaza el 27 de diciembre de 2008. La masacre, denominada Operación Plomo Fundido, fue la más sangrienta emprendida contra el densamente poblado enclave costero. Tres semanas de ataques por tierra, mar y aire dejaron en ruinas unas 20.000 viviendas y otros miles de edificios.

Unidad

El Dr. Hani Albasoos, profesor de ciencias políticas de la Universidad Islámica de Gaza, señala que en los círculos y medios de comunicación israelíes se habla abundantemente de la Operación Plomo Fundido. "Esto significa que la amenaza es real. Israel ya se está preparando para la nueva guerra".

Los analista coinciden en que el plan de unificación palestino es la única manera de derrotar los planes de guerra israelíes. "La resistencia tiene que forjar una estrategia unificada", insiste Mustafa Al-Sawwaf, experto político y veterano periodista. "Es lo mejor para todos los palestinos".

Sawwaf afirma que Israel tiene fácil atacar y aislar a Gaza porque Cisjordania ha quedado fuera de juego. "No tiene sentido que la resistencia se limite a Gaza mientras que no hay ataques de la resistencia desde Cisjordania. La resistencia también se debería activar ahí".

Albasoos considera que para las facciones de la resistencia palestina es absolutamente crucial coordinarse antes de reaccionar frente a las provocaciones israelíes. "Deben plantear una respuesta unificada adecuada".

Okal, miembro del consejo de administración de la Universidad Al-Azhar y miembro de Fatah, espera que los grupos de la resistencia no caigan en la trampa de Israel. "Es muy importante no permitir que las provocaciones nos lleven a una reacción precipitada", advirtió. "Tenemos que decidir cuál es la manera adecuada de responder a las provocaciones. Los cohetes no son necesariamente la respuesta. Tiene que ser una respuesta unificada y bien calculada".

El pasado lunes el gobierno de Hamás anunció que está tomando medidas para preservar los más altos intereses del pueblo palestino, lo que muchos pueden entender como una implicación en detener el lanzamiento de cohetes.

Desde el final de la guerra de Gaza sigue siendo válido un frágil alto el fuego entre Hamás e Israel.